Es un ciudad perteneciente a la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha (España).
Está situada a una altitud de 946 metros y una superficie cercana a los 912 km²
es uno de los mayores de España.
Fue el Paleolítico Superior cuando se empezo a originar los primeros asentamientos.
Con la conquista musulmana
fue cuando se dio origen a la ciudad con la fortaleza de Qūnka.
El rey cristiano Alfonso VIII la conquistó en 1177
y le otorgó el Fuero de Cuenca, uno de los más prestigiosos de la historia de Castilla.
Su economía se centra sobre todo en el turismo, potenciado desde que en 1996
su casco antiguo fuese declarado Patrimonio de la Humanidad.
Cuenca conserva un importante patrimonio histórico y arquitectónico, que se extiende por
toda la ciudad antigua, aunque focalizado en edificios como la Catedral
o las Casas Colgadas,
que se han convertido en el símbolo de la ciudad.